No soy de escribir reviews sobre pelis ni nada mas allá de un comentario visceral de lo que me pareció viéndola, porque hay críticos que saben mucho más que yo sobre «cinefilogia», lo que no significa que no escriba mi opinión o lo que sentí viéndola, pero no espere un análisis profesional.
Bueno, yo sé que todos tenemos películas que nos encantan, otras que vemos una y otra vez sin parar, otras que odiamos y otras que, no siempre pasa, nos identifican.
No la película entera pero sí sus personajes, bueno, puede pasar que una película entera te identifique pero creo que es más difícil que eso pase. Hay un par de pelis que me encantan y dos personajes de distintas pelis que me identificaron en momentos determinados de mi vida.
Eso me pasó con el personaje de la Hit-Girl en la peli «IF I STAY», basada en la novela homónima escrita por Gayle Forman, donde una cabra chica de 17 años ve como pasa su vida después de un accidente, si no ha visto la película mejor no lea porque de seguro se me saldrán spoilers entremedio que no puedo dejar de mencionarlos.
Mía, interpretada por la máxima Hit-Girl de Kick-ass, es una niña, en el otro hemisferio del mundo donde los niños de 16 años son como los veintitantos de acá, allá a los 16 ya se van de las casas a vivir en pareja o con amigos y trabajar hasta la muerte, y si pueden, estudian, lo que en este lado del orbe se vive un par de años mas tarde, y en el caso de lo que vive Mía, en varios años más.
En fin, Mía es una talentosa músico, su pasión es tocar Violoncello y perderse en la pasión de tocarlo. Es una chiquilla estructurada, ordena, que le gusta entender lo que pasa y poder controlarlo de alguna manera sin ser obsesiva, pero entendiendo lo que pasa. Le cuesta generar amistades con el resto de la gente porque sus costumbres no son del chiquillo común que le gusta las fiestas, el carrete hasta tarde, sí le gusta el rock, sí le gusta compartir, pero el reventón no es lo suyo.
Bueno, Mía conoce a un rockero, se enamoran, comparten pero Hit-Girl se siente un poco incómoda porque el pololi es de los que sí carretean, vive una vida de rock star y todo, entonces a esta cabra le complica pensar que es una aburrida y quizás su hombre le gustaría más si fuera «normal» o que compartiera más en sus círculos…
Hasta aquí el resumen de lo que es este personaje, y me identificó porque su estructura, complicación en sociabilizar de manera «carretera» y colapso mental de sentirse una «fome» en situaciones determinadas, son muy similares a lo que me ha pasado últimamente.
Claro, hace rato dejé de tener 17 años, no toco instrumento alguno ni he analizado mi vida tan «obligatoriamente» como ella (spoiler), pero sí me gusta el orden, levantarme temprano y acostarme a una hora que me permita descansar de verdad, salir con mis amigos a conversar y disfrutar un momento agradable sin tener que reventarme, me cuesta conocer gente nueva, como que no hablo naaaa’ si no conozco a alguien, no me nace «meter conversa», pero se me pasa si alguien me presenta y me cae bien, ahí no paro de hablar con nada, es como la «empezá», ¿cachan?
Me gusta compartir pero no mucho trasnochar, lo hice en un minuto que me cuestioné si me perdía de algo, la pasé bien, no lo niego y lo repito de vez en cuando, pero no para hacerlo todos los fin de semana.
Y eso de sentirme aburrida para el resto, siempre. No pasa un día en que no me asuste con que mis amigos o pololo se cansén de mi forma tan poco «entretenida» según el canón establecido por las fiestas Wild On de E! porque no me gusta perder el control cada noche de sábado.
Por eso me identificó con Mía, porque ella interpreta tan bien lo que me pasa en esos casos. El miedo, en salir de la zona segura de amigos y conocer gente nueva sin ser desadaptada y todo eso.
¿Les pasa también? ¿Somos más Mías?
No he leído el libro, pero lo haré para ver que pasa después de…
