Análisis de la Gala Festivalera 2012

Como experimento sociológico, el show de la Gala del Festival de Viña, funciona bastante bien, pero, si hilamos fino, le faltan hartos años luz para ser decente…

Por ejemplo, no pueden ser tan desatinados y poner a comentar a Luciano Brancoli, que tenía intereses comprometidos, ya que él diseñó varios vestidos para la ocasión. Cero objetividad y credibilidad. Obviamente, iba a comportarse como talibán con sus colegas de oficio. Los momentos lejos más desagradables y de mal gusto, fue cuando se molestó porque una de las invitadas decidió no usar su diseño y comenzó a despotricar contra esta. La otra metida de pata, fue cuando mando a la Tía Sonia a hacerse una lipo. ¿Qué onda? Esos comentarios JAMAS se escuchan en una alfombra roja.

La dirección  y producción del evento, Pésima. La alfombra roja parecía una pasarela eterna, LA PLATAFORMA EN 360° a la Chilena, fue lejos lo peor. Los invitados se veían complicadísimos cuando debían subir y someterse al escrutinio público, además de verse harto ridículos. Lo que quisieron imitar, que era la cámara 360° de E! Entertainment Television, no les resultó ni por si acaso. En E! la hacen con fotos, la pasan a un software y luego la muestran animada. El pobre actor o actriz, jamás hace tamaño ridículo.

La forma de abordar a los invitados era demasiado estructurada ya que solo los captaban momentos antes de entrar al evento. Los noteros que cubrían el evento, eran muy pocos. Además hubo mucha gente que apenas mostraron y otros que simplemente se saltaron.

Los varones se esforzaron más este año, se notó más asesoría y preocupación. Vimos mucho más glamour que el año pasado.

En el caso de las chicas, hubo de todo; aciertos, desaciertos y cosas que simplemente no eran de este mundo.

Lejos la mejor vestida fue Carolina Mestrovic, en un Claudio Mansilla que apenas mostraron. Con un vestido rosa pálido, lucio una silueta impecable con cortes limpios y de una confección inigualable.

Luego la sigue la Cata Pulido, con un Alexander McQueen  verde que era muy acorde para su silueta y un peinado perfecto.m

La Pancha Merino, se veía preciosa en un Paulo Mendez al callo, el color del vestido perfecto y un maquillaje y peinado impecable.

La Fran García Huidobro vistió un  diseño de Nicanor Bravo y se veía muy bien, saco partido a su figura, se la jugó  por un color diferente y se veía espectacular.

Los casos más graves de la noche, que comparten el primer lugar de las peores vestidas, son Tanza Varela, con un diseño de Abraham Escalona, que yo no sé si quería evocar el disfraz de Xena. Con una confección del terror y una tela nada más fea, la Tanzita estaba lista para irse al concurso de Cosplays de la ComicCon.  Comparte el cetro del horror, la señorita Kenita Larrain, vestida por Millaray Palma, (luciendo su mala copia del Dior de Charlize Theron) con un vestido con transparencias, donde se podía ver su ombligo. El mismo error que la Tanzita, telas pésimas, confección espantosa y un diseño muy malo y desfavorecedor. Los accesorios de la Kenita, uf, mal aplicados y feos. Estas cabras tienen buena figura, pero se la farrearon, también es mucha responsabilidad de los que están tras el diseño, porque es su deber decirles al cliente que algo no está funcionando, por muy porfiado que este sea.

Otro caso complejo fue el de la Doña. Claudia Di Girólamo llevaba un Ralph Lauren con cero actitud para caminar, no lo entendimos. Como tampoco su vestido, que le quedaba grande. Los collares que llevaba no tenían ninguna relación con el vestido, dio la impresión, que los tomo y se los coloco a la rápida y nadie le dijo nada porque iba apurada.

El moño colegial de Maura Rivera, fue uno de los peinados más anticuados de la jornada ¿Qué habrá pensado, qué estábamos en los 90’s? Con sus rulitos a los lados, simplemente me acordé cuando estaba en la básica…

Ojala que este ejercicio mejore año a año, hubieron chicas súper bien preparadas y otras que simplemente destiñeron. No queremos ver ni calzones, ni tajos hasta la cresta iliaca. Esperamos que el otro año sea mejor. Falto un trabajo más integrado de parte de las personas tras los artistas de la gala. Habían trajes que no tenían nada que ver  con los accesorios, peinados y maquillaje y daba la impresión que todo se trató por separado.

Nos faltó ver más diseñadores nuevos y emergentes, siempre son los mismos en la escena y no se renuevan. Algunos diseños no distaban de galas de colegios en el 2000.

 

¿Cuáles fueron tus favoritos de la Gala 2012?

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