Vengo a contarles mi experiencia usando la Cleansing Water de Dr.G.
Llevo ya 2 meses aproximadamente usando esta agua limpiadora como un complemento al paso N°1 de mi rutina facial de 10 pasos coreana junto con mi limpiador facial habitual.
En un comienzo mi intención era sólo probarla para saber si la podía incluir dentro de mi rutina y de paso ver si es que tenía buenos resultados removiendo maquillaje, porque como maquilladora, estoy constantemente probando diferentes aguas micelares, aguas limpiadoras, lociones limpiadoras, etc., para poder ofrecer a la piel de mis clientas un buen cuidado desde lo que me corresponde y así obtener un maquillaje con resultados óptimos.
Mi sorpresa fue que no sólo me gustó para uso personal, si no que ¡terminé reemplazando el agua micelar que utilizaba para trabajar!
Para que me entiendan mejor, vamos a ver qué es lo que promete y cuáles son sus ingredientes:
Descripción y composición
Dice ser un desmaquillante, formulado con agua Biomimética, que simula el agua que se encuentra en nuestra piel, reforzando su barrera natural y siendo capaz de remover maquillaje y limpiar el rostro de cualquier suciedad.
Como componentes activos tiene: agua, PEG-6 cáprico/caprílico (emoliente soluble en agua), Butilenos (alcoholes usados como solubles), aceite de linaza (hidratante y antioxidante), aceite de ricino (regenerador, antibacteriano, antinflamatorio), dentro de otros.
Cómo se aplica
Según indica la botella, hay que aplicar en un algodón y luego proceder a limpiar todo el rostro. Luego, para eliminar máscara de pestañas o maquillaje de larga duración, mantener presionado en la zona durante 5 a 10 segundos para disolverlo y reaplicar hasta remover por completo. Si es necesario, lavar el rostro con agua tibia.
Experiencia en piel mixta a grasa
Sólo al tocarla pude notar que su textura es distinta a cualquier otro limpiador que había probado antes. Es líquida pero un poco viscosa. Casi como un aceite, pero con la ligereza y frescura que ofrece el agua.
Mi piel suele ser grasa, pero con una capa de resequedad que cubre mi nariz y mejillas, por lo que me es difícil encontrar productos que cubran todas mis necesidades al mismo tiempo. Tampoco suelo maquillarme mucho, así que la utilicé como una ayuda más para dejar piel bien limpia.
A diferencia de lo que me sucede con otras aguas limpiadoras o micelares, pude notar que mi rostro no presentó mayor resequedad a la que tenía al momento de usarla. Además, mi piel suele ser bastante reactiva a productos de limpieza facial, generando sarpullido e irritación. Pero para mi sorpresa éste no fue el caso. Lo que sí, yo siempre suelo retirar este tipo de productos al momento de continuar con mi rutina de cuidados diaria, por lo que hay que considerar ese factor.
Tuve también la oportunidad de trabajar con ella en todo tipo de pieles: grasas. secas, mixtas y muy reactivas. En ninguna ocasión las personas presentaron irritación, exceso de gratitud ni resequedad. De hecho, pude notar que, al momento de preparar su piel, fue mucho más fácil retirar el maquillaje y suciedad ambiental, además de dejar un aspecto luminoso e hidratado, cosa que nunca me había pasado antes. Todo esto sin retirarlo con agua como indica el empaque
Donde no tuve éxito
Donde no tuve éxito fue retirando máscara de pestañas y labiales de larga duración. Toma demasiado tiempo, producto y trabajo para lograrlo. Además, es innecesario tironear tanto la piel si tenemos limpiadores bifásicos y aceites limpiadores que hacen mucho mejor ese trabajo.
¿Lo Recomiendo?
Sí, pero no para usarlo por sí sólo. En todo el tiempo que llevo usándola, no puedo afirmar que haya generado una mejora significativa en mi piel más que aportar luminosidad momentánea. Cumple su función, pero tampoco es magia. No me malentiendan, me gusta mucho, lo único que les digo, es que no lo vean como una solución milagrosa para no tener que lavarse el rostro en la noche. Háganlo igual por favor, úsenlo como un complemento y les aseguro que valdrá la pena.
¡¡Además son 500 ml!! Pueden comprarla en Paris.cl y Facery.cl por $21.900. Les durará una eternidad.
Por: Francisca Briones @Franchabriones.mua