La reciente ganadora del Oscar, Lupita Nyong’o, ha irrumpido en los medios de moda por su estilo en las alfombras rojas y por su desbordante belleza, por eso muchos se sorprenden de las palabras de Lupita, quien confiesa que durante toda su vida se sintió horrible por su color de piel, nunca pensó que una chica con sus características físicas pudiese ser considerada bella.
Quiero tomar esta oportunidad para hablar acerca de la belleza, de la belleza negra, de la belleza oscura.
Después de leer una carta de una admiradora, quien confesaba odiar su piel oscura hasta que me vio en la pantalla. Recuerdo una época en que yo me sentía fea. Prendía la televisión y sólo veía piel blanca, solía burlarme y bromear acerca de mi piel de «sombras nocturnas». Y cuando fui adolescente, el odio hacia mí misma empeoró, como se pueden imaginar lo que sucede durante la adolescencia. Y una de mis oraciones a Dios, el trabajador milagroso, era que un día yo despertaría siendo caucásica. Traté de negociar con Dios, le dije que dejaría de robar cubos de azúcar durante la noche sólo si me daba lo que yo quería, que escucharía cada una de las palabras de mi madre y nunca perdería de nuevo el sweater de la escuela, sólo si él me hacía un poco más blanca. Pero creo que Dios no se impresionó con mis monedas de cambio porque él nunca me escuchó.
Mi madre solía recordarme que ella pensaba que yo era hermosa, pero eso no era justo, ella es mi madre, por supuesto que ella tiene que pensar que yo soy hermosa. Y entonces… Alek Wek… una modelo célebre.
Ella era oscura como la noche, y estaba en todas las pasarelas y en cada revista y todo el mundo hablaba de lo hermosa que era. Hasta Oprah la llamó una vez hermosa y eso lo convirtió en un hecho. No podía creer que las personas estuvieran aceptando y amando a una persona que se parecía mucho a mí, así de bella. Mi complexión siempre fue un obstáculo a superar, pero de pronto Oprah estaba diciéndome que no era así. Y mi madre solía decirme de nuevo: ‘No puedes comer la belleza. Eso no te alimenta.’ Y esas palabras me atormentaban y fastidiaban; realmente no las entendía hasta que finalmente me di cuenta que la belleza no era una cosa que yo podía adquirir o consumir, era algo que yo tenía que ser.
Lo que mi madre quería decir es que no puedes sostener ni apoyar tu confianza en la manera que te ves. Lo que es fundamentalmente bello es la compasión hacia ti y hacia las personas que se encuentran a tu alrededor. Esa belleza inflama el corazón y encanta tu alma. Eso pasó con Patsey, la recordamos por la belleza de su espíritu, aún si la belleza de su cuerpo se desvaneció. Y espero que mi presencia en las pantallas y en las revistas puedan llevarlas a ustedes, jóvenes, en un viaje similar. Que sientas la validación de tu belleza exterior pero también trabajar profundamente en ser belle por dentro. No hay sombra alguna en esa belleza.
Lo que más nos conmueve, más allá de la percepción propia de la belleza, es ver como la historia promueve un estereotipo de belleza caucásica, ojos claros, cabello rubio y piel blanca, sino pregúntele a Barbie, discriminando en pleno siglo XXI a quienes no posean esas características, y para colmo, los medios siguen difundiendo este mensaje.
Incluso en Chile, donde por geografía sus habitantes son morenos, pelo oscuro, ojos oscuros y piel trigueña, nos auto discriminamos y exaltamos a quienes son un poco «mas claritos».
Esa idea, imagen y estereotipo se transmite a niños y adolescentes quienes se sienten feos, llegando al odio hacia ellos mismos, creando una sociedad enferma y con baja autoestima.
Por eso mismo es importante que exista diversidad en los medios para que de una vez por todas todos podamos sentirnos parte de algo y nos nos sigamos viendo como unos «apartados» por no poseer la belleza que buscan hasta ahora.
Me ha tocado ir a eventos donde es sorprendente ver como los fotógrafos de las «sociales» buscan retratar para sus medios el mismo estereotipo de siempre: Minas muy flacas, altas, rubias de preferencia y ojitos claros. Si no eres así, simplemente no te ven. Es estúpido de mi parte preocuparme por esto, pero es inevitable no notarlo y lamentablemente se sigue dando una imagen irreal de lo que somos, porque la mayoría es distinto de ese ideal.
El punto es que deberíamos ser menos estereotipados y darnos cuenta que hay belleza en todos los colores, tamaños y contexturas y dar ese ejemplo a todos, para que no sigan existiendo Lupitas que se odiaban por no ser como quieren, por eso sus palabras son tan importantes y conmovedores, porque lamentablemente tuvo que ser este éxito que está teniendo, el que le abrió los ojos y pudo aceptarse….