En el caso de terremotos como el recién vivido en el norte de nuestro país, es necesaria una respuesta rápida y coordinada, porque el tiempo es crucial.
La respuesta a un desastre natural de esta envergadura mejora sustancialmente si se cuenta con la tecnología adecuada. Apenas ocurrido el terremoto las fuerzas de seguridad se conectan a través de una red de seguridad pública, preparada para situaciones de emergencia, que soporta movimientos sísmicos y tiene la autonomía necesaria para atender las consecuencias del desastre natural: los generadores y baterías se activan automáticamente por un período determinado para que se pueda coordinar la respuesta, mientras se restablece la electricidad. A través de radios digitales troncalizadas los diversos cuarteles se contactan para establecer el plan de acción.
Las fuerzas de seguridad podrían conectarse por medio de una red LTE propia del Estado, la cual permite enviar en cuestión de segundos información de datos. Por medio de ésta y una aplicación de GPS los bomberos, brigadas de rescate y médicos, son localizados y distribuidos según cercanía y disponibilidad. Reciben un mapa con la ubicación de la zona a la que tienen que dirigirse e imágenes de la misma. Llegan al lugar en menos tiempo y preparados con los equipos necesarios. En pocos minutos se encuentran distribuidos en las zonas más afectadas. La amplia cobertura permite hablar por los radios con claridad a lo largo del operativo.
Por su parte los bomberos ingresan desde sus tablets en la base de datos y a través de ésta pueden visualizar, un aproximado de la cantidad de heridos que requieren asistencia médica y la gravedad de su estado. Por otro lado, el comando central de un hospital entiende que necesita enviar ambulancias cuanto antes para salvarles la vida. Por la información recogida, en el sistema compartido de las fuerzas de seguridad, puede establecer el equipo que las ambulancias deben llevar para atender a las víctimas y cuál es su locación exacta. El despacho de ambulancias es inmediato y eficaz.
El personal de campo encargado de llevar un registro de las personas transportadas a hospitales cuenta con un dispositivo que lee huellas digitales y registra rápidamente a los evacuados. Como parte de la acción se ha implementado un puesto de información en el que civiles pueden consultar si sus familiares fueron transportados a algún hospital.
La respuesta de las fuerzas de seguridad está apoyada en información y esfuerzos coordinados, teniendo como resultado un modus operandi efectivo.
Los 5 aspectos clave de las comunicaciones durante una emergencia
1. Las Comunicaciones de Emergencia y Seguridad Pública no fueron diseñadas para generar rentabilidad. Fueron diseñadas para FUNCIONAR en el “Peor Escenario”, brindando la capacidad suficiente en los momentos críticos, de creciente tráfico de información.
2. Hay vidas en juego.
3. No puede haber cortes. Tiene que haber acceso inmediato a los recursos 24 x 7
4. Las comunicaciones de Seguridad Pública deben tener un grado superior de cobertura y capacidad. Las redes comerciales fueron diseñadas para otros fines donde su capacidad responde a cuestiones económicas razonables. En una situación de emergencia, estas redes comerciales tienden a fallar porque no fueron diseñadas para funcionar bajo estas condiciones.
5. El refuerzo de sitios y la redundancia son elementos críticos en el diseño de un sistema de comunicación para seguridad pública.
6. La Seguridad Pública no puede depender de redes comerciales durante incidentes críticos o catástrofes.