Me desespera la famosa “reactivación económica” están incitando a la gente a comprar y comprar “creando” las necesidades más innecesarias en las personas. Mi queja es la siguiente: El invierno comenzó hace 3 semanas y ya no queda nada en las tiendas de retail…la ropa de invierno es un mito.
Hace un par de años, recuerdo que mis grandes compras de la estación invernal, eran en agosto, cuando estaba todo baratísimo y había para regodearse. Pero ahora, así como vamos, en agosto estarán vendiendo bikinis…
Entiendo el “afán” de anticiparse a la temporada, pero liquidar y vaciar el stock completamente, me parece descarnado. ¿Qué tal si necesito con urgencia de urgencias guantes, gorros o bufandas? ¿O si mi hermana chica necesita ropa gruesa? ¿Soluciones? Comprar en Patronato, la ropa usada, los persas y hacerle la cruz al retail.
No hay nada más molesto, que ver ropa gruesa o de colegio en diciembre e incluso ahora, que las temperaturas bordean los 0° se burlen de nosotras, colocando vestiditos y ropas livianas que para ser usadas, deben esperar como cuatro meses en el closet y para variar, están caras.
Yo creo que la gente, especialmente nosotras, debemos gobernarnos y no caer en las jugarretas del retail (salvo que una prenda sea espectacular y merezca la inversión). Debemos agarrarnos los Chiteco y contenernos hasta que los precios bajen de frentón. El problema es que ahora cuando los precios bajan, ya no hay nada, porque todas las pastelas compraron a precio normal y despilfarraron su dinero.
Me carga como se maneja la rotación de la ropa en el retail. Presionan al consumidor, y como la gente está “tan anticipada” desde el terremoto, el Chilensis Medium Non-Sapien, empezó a consumir cuanta huevada encontró. Fenómeno gatillado por la presión “alarmista” de los medios o simplemente porque a la gente le gusta comprar (tanto así que robaban hasta plasmas; todo, por si acaso…) y compra como que el mundo se fuera a acabar y eso que aún falta para el 2012…