El Western o película de vaqueros es un género cinematográfico que traspasó su dependencia de ser ambientado en el Oeste Norteamericano para ser catalogado como tal al definir sus pretensiones narrativas y sus tópicos a seguir, ya sean la confrontación del bien y el mal, así como la aventura en lugares inhóspitos y la falta de la ley la cual debe ser tomada por manos propias, llámese también como venganza. Viéndolo así hay muchas películas que caen dentro de este género sin querer serlo, desde películas como A Bug’s Life hasta Los Siete Samurais de Kurosawa.
True Grit (Temple de acero ) cae dentro de la clásica y recalcitrante forma de hacer el western, ya sea en su historia como en su puesta en escena y ambientación. Dirigida por la dupla de Joel e Ethan Coen, famosos realizadores del cine “indie” noteamericano, con películas anteriores como Fargo y la ganadora del Oscar No Country for Old Men otro western solapado.
En Temple de Acero nos cuentan la historia de Mattie Ross (Hailee Steindfeld) una niña de 14 años, que acaba de quedar huérfana de padre, quien fue asesinado por un forajido llamado Tom Chaney (Josh Brolin). Mattie, de armas tomar, quiere justicia para su padre y familia por lo que no tiene tiempo para esperar por esta y decide contratar un sheriff para ir por él y asesinarlo. Rooster Cogburn (Jeff Bridges) es el elegido para la misión, por su “temple de acero” (de ahí el nombre de la película) y por ser un duro y corajudo señor que las ha vivido todas, obviando su gusto por la bebida y su imparable lengua. A todo esto se les sumará un nuevo personaje quien también quiere apresar al forajido por otros crímenes, el autodenominado Texas Ranger Mr. Labeouf (Matt Damon). Juntos emprenden el viaje de sus vidas para capturar a su presa y la justicia que tanto anhelan.
Contada con todo el clasicismo del western pero con el humor negro y la agilidad que los Coen pueden ofrecer. True Grit es una bella y divertida aventura del oeste con un atractivo trió de personajes donde destacan el parlanchín sheriff interpretado por Jeff Bridges, increíble en su rol, y la revelación Hailee Steindfeld como la niña prodigio de la historia. Mis apuestas para el Oscar ya van para ella. Los Coen vuelven con esta cinta, manteniendo sus temáticas, como la violencia y la moral. Muy Buena.
