Era 1997 y a las librerías británicas llegaba un libro sobre un pequeño niño huérfano a cargo de sus tíos con una extraña cicatriz en forma de rayo en la frente. Los primeros en leerlos se cautivaron con la historia esperando un siguiente tomo. Tiempo después cuando logró apoderarse de un lugar en librerías alrededor del mundo, Harry Potter ya era un éxito, uno que se confirmó con su llegada al séptimo arte en 2001, a partir de ahí ya nadie podía detener al “hijo de tinta” de Joanne Rowling.
Miles de fanáticos se han reunido desde por lo menos 10 años a esperar tanto los libros como las películas que relatan la mágica historia de este pequeño que descubre sus poderes y, con ellos, una vida llena de misterios y peligros. El universo de Harry Potter ha logrado mantenerse en la mente de sus seguidores por larguísimo tiempo, y de hecho, su público fue creciendo con el mismo protagonista; así es como ahora, los mismo niños de 10 y 11 años que hacían la fila fuera de las lecturas de J. K. a fines de los 90 son lo que ahora con 23 y más esperan en los cines de todo el mundo la última aparición de Harry en la pantalla grande.
A muchos les duele decirlo, pero ya quedan solo semanas para que la tan esperada cinta llegue simultáneamente en todo el mundo, este 15 de Julio se estrena y aquí en nuestro Chile tendremos la fortuna de verla un día antes, sí algo bueno que nos toque. Y es que entre tanto trailer la fanaticada está ansiosa de llenar –como cada vez– los pasillos de todos los cines del país. Y por fin, los no tan fanáticos podrán descubrir que pasa entre Harry y El-Que-No-Debe-Ser-Nombrado en la batalla final, quienes viven y si –aunque sea triste– quienes mueren, porque no hay batalla sin unas cuantas bajas.
Claro está que las películas del universo mágico de Harry no han seguido la misma linea, algo obvio por la rotación en la silla de dirección que ha sufrido la saga, con participaciones como Chris Columbus en las dos primeras con un toque más infantil, recordemos que Chris está detrás de películas familiares como “Mi Pobre Angelito ”. Después llegó el mexicano Alfonso Cuarón para la tercera entrega entregado los primeros vestigios de los toque “oscuros” que llegaron después. En “El Cáliz de Fuego” llegó el primer británico Mike Newell y con él la primera censura a la saga, desde ahora serían para mayores de 13 años (¿Cuál es la diferencia o la razón? Yo, por lo menos, aún no entiendo ninguna).
Pero poco le duró a Mike su éxito, ya que sería el tiempo de cambiar nuevamente el nombre en la silla y poner el de David Yates (y al parecer con tinta indeleble) porque llegó asegurándose de las tres restantes y logrando convertirlas en cuatro. Acto que obviamente a los fanáticos no les molestó, una película más no hacía nada de mal, aunque después de ver “La Orden del Fénix” no estaban muy seguros de que tanto podía hacer este segundo británico por el fin de la saga.
Finalmente llegó a mediados de 2009 “El Misterio del Príncipe” (o “Príncipe Mestizo” como usted quiera decirle) y calmó un poco al público y dejando ansias de la última entrega.
Así llegó a fines del año pasado el principio del fin: “Harry Potter y las Reliquias de la Muerte, Parte 1” y ahora nos tiene contando las semanas para ver como esta saga que nos acompañó durante tanto tiempo llega a su fin definitivo (sí, definitivo, porque en 2007 con la llegada del último libro se marcó un fin que solo fue consolado por las películas).
Así que para ir calentando los motores solo queda asegurarse con una entrada durante los primeros días, instalarse en la butaca de su preferencia con un balde de cabritas, una bebida y, para los más sentimentales, una caja de pañuelos porque esta entrega promete acción y sorpresas.
Colaboradora invitada: @Camiland_diaz