Hay publicidad invasiva que todos odiamos, como la publicidad que aparece en la mitad de un video que estamos viendo o los pop-ups que aparecen en la mayoría de los sitios web que tapan todo el contenido y que además te engañan al intentar cerrarlos porque ponen una «X» ultra pequeña o casi invisible. Hay unas peores donde el botón cerrar (X) se arranca del mouse, horrible. Pero si hay algo peor peor que eso, son LAS LLAMADAS TELEFÓNICAS A TU CASA O CELU OFRECIENDO SERVICIOS.
¿Hay algo peor que eso? Que alguien interrumpa tu día sin que lo hayas solicitado y sin permiso alguno ¿Ah?
Personalmente odio esas llamadas, la mayoría de las veces bloqueo los números telefónicos que llaman y si por alguna razón contesto, les digo que «ya tengo el mismo servicio que me ofrecen», así no insisten en venderlo porque supuestamente ya lo tengo. Mal mentir, lo sé, pero es que si les dices que no estás interesado, te insistirán de una manera hostigante que te obligará a ser hostil para responder, así que mejor me ahorro eso y les digo que gracias, estoy feliz con el servicio «que venden y tengo» pero que en verdad no tengo.
No sé por qué las empresas usan este recurso si saben que es muy molesto y que en general quienes lo contratan fueron casi obligados o cometieron un error porque no entendían bien.
Bueno, como a la mayoría de esta gente no sigue lógica y necesitan que los expertos investigadores confirmen las lógicas de la vida, por fin se publicó el resultado de la investigación desarrollada por la agencia digital MediaInteractive junto al think tank TrenDigital de la Facultad de Comunicaciones UC, para conocer el impacto que este nuevo tipo de publicidad tiene en nuestro país.
La lógica lo decía pero ahora la investigación lo confirma: LA MAYORÍA ODIA LAS LLAMADAS SPAM Y SI PUDIERA LEGISLAR, EXIGIRÍA QUE SE PROHÍBAN.
Las cinco prácticas que prohibirían los chilenos si pudieran legislar son:
Los llamados de promoción o venta de servicios al celular personal con un 75,4% de las preferencias, las ventanas emergentes en páginas web con un 54,2%, las interrupciones en los videos online con un 50,1%, la entrega de panfletos en la calle con un 45,7% y carteles en la vía pública con 37,7%. Para Daniel Halpern, Director del TrenDigital y uno de los investigadores del estudio, de los datos puede observarse dos tendencias. Por una parte, las personas castigan la publicidad más invasiva o que interrumpe las actividades regulares que los individuos realizan, como es el caso de la llamada telefónica o las ventanas emergentes. Por otra parte, las personas ven a los carteles en la vía pública como contaminación visual y que interferiría de forma negativa su visión de ciudad.
¿Qué se hace entonces para evitar la publicidad invasiva?
Con respecto a las reacciones frecuentes que dicen tener las personas frente a estas molestias, las cinco respuestas más comunes fueron: el 91,5% salta los videos automáticos de publicidad antes que terminen, un 78,9% elimina correos electrónicos con publicidad sin siquiera abrirlos o los ignoro/envío a spam, un 68,3% no contesta o corta la llamada cuando ve que el número telefónico es publicitario, un 65,7% elimina los mensajes de texto con publicidad sin siquiera leerlos y un 60,3% hace otras cosas mientras espera que termine la publicidad para no exponerse al contenido que entrega. Es interesante ver que un 48,5% instala constantemente adblockers (bloqueadores publicitarios) para evitar exponerse a anuncios online, mientras que un 45,6% desinstala de forma constante aplicaciones en sus teléfonos por la cantidad de publicidad que aparece. De forma similar, el 24,5% de usuarios ha pensado en dejar de usar una marca, producto o servicio por todo lo que insisten con su publicidad online.
Me sorprende un poco que los generadores de publicidad invasiva no se hayan «dado cuenta antes» de que esta forma de publicitar causa más rechazo que acogida.
A ellos los invito a ver la investigación completa en http://mediainteractive.cl/publicidad_en_chile.pdf, ahí también se menciona lo que sí funciona en publicidad, a ver si adoptan una nueva forma de llegar a la gente, porque ahora quienes más ganan son los bloqueadores de publicidad en navegadores como AdBlock para escritorio y adblockbrowser para el movil o las aplicaciones móviles que detectan las llamadas spam como TrueCaller.
Así que eso, ¡DEJEN DE LLAMAR!