Ha pasado el tiempo desde el lanzamiento del iPhone 7 al mercado y sé que ya conocen las maravillas del equipo que graba en alta definición, que es resistente al agua, su batería dura más, sonido estéreo, pantalla retina mejorada, etc.
Hoy quiero enfocarme en la utilidad de trabajo del iPhone y cómo su cámara me hizo sentir una profesional en Lollapalooza.
Qué tiene de maravilloso la cámara fotográfica del iPhone 7 Plus
El zoom del iPhone 7 Plus
Primero que nada hablaré de la tecnología de la cámara fotográfica, que en realidad son DOS CÁMARAS: la cámara de 12 megapixeles con gran angular incluye otra de 12 megapixeles con teleobjetivo que te acerca más a todo. Puedes hacer un zoom de alta calidad aún desde más lejos.
Esto significa que puedes sacar fotos haciendo 2X sin perder calidad porque es un zoom óptico, que en palabras más simples podríamos compararlo con una lupa que hace ver más grande un objetivo gracias al lente integrado.
También puedes acercar hasta 10 veces un objetivo con el zoom digital de 10X, pero esto agranda la imagen digitalmente.
El zoom funciona cuando tocas el número que está dentro del cirlculo y deslizas tu dedo como una rueda. De esa forma se aleja o acerca el objetivo.
El modo Retrato del iPhone 7 Plus y su profundidad de campo
Como su cámara es dual, el iPhone 7+ tiene una característica que amé con el alma: La profundidad de campo que se da cuando usas el modo Retrato.
Esto hace que a una distancias razonable el objetivo se enfoca y el fondo se desenfoca (se ve borroso, dando protagonismo a lo que realmente se quiere mostrar de manera profesional.
Qué decir de los videos
Los videos se graban en alta definición con un sonido maravilloso. Al tener profundidad de cámara y teleobjetivo, el encuadre del video se ve mucho mejor, más amplio. Y el sonido es genial.
Lo único que no arregla, es mi motricidad.
Mi experiencia reporteando el Lollapalooza con el iPhone 7 Plus y capturando la esencia del festival
Amo el hecho de que mi teléfono también sea mi herramienta de trabajo, liviano, sin tanto aparataje y con resultados tan profesionales.
Sin ser fotógrafa puedo decir que todas las imágenes que tomé, se veían demasiado bien, muy claras y nítidas y además el modo Retrato les dio una atmósfera mucho más íntima, como mostrando que, a pesar de las 160 mil personas que estuvieron en el festival, cada uno estaba viviendo una experiencia personal.
Sin duda pude capturar el ambiente, la gente disfrutando y mostrar más que sólo un puñado de bandas reunidas en el Parque O’Higgins.