ARQUEOLOGÍA DE LA MODA: Desde Rusia con amor, Ushanka

Lo que aprendimos de “historia universal” en el colegio es todo aquello que tenga que ver con Europa central y Estados Unidos. Por si en una de esas casualidades de la vida en nuestros cuadernos escolares aparece algún nombre de otro país que no pertenezca a estas regiones del mundo, es porque tuvo alguna relación/negocio/guerra con los anteriores y no por otra cosa. Pero esta “historia universal” es solo una ínfima parte de la verdadera HISTORIA UNIVERSAL,  aquella que incluye a otros imperios que se escriben en letras que ni siquiera aparece en nuestro alfabeto y que conocen de nosotros, lo mismo que conocemos de ellos, nada.

En el lado occidental “primer mundista»del mapa (o sea desde Alemania hacia el oeste) los hombres por tradición de varios siglos usan pantalón, camisa y gorro de paño, o sea “nosotros” o “lo de siempre”. Hacia el otro lado del mundo hasta hace más o menos un siglo, usaban vestidos y abrigos que rozaban el suelo, atados por cinturones, botas altas y altos sombreros de pieles.

Hay ciertas prendas que para nosotros nos puede parecer “una propuesta de temporada”, sobretodo cuando un diseñador X lanza una colección “inspirada” en cierto país llamado #RaroExóticosIninglésOficial. Mientras en el mismísimo país inspirador la prenda original se vende en la calle por unas pocas monedas y es parte de la indumentaria habitual, de siempre, de la calle.

El Ushanka (a.k.a. “gorro ruso”) es una prenda común en los territorios de Europa del este y Asia central. Además de común, es la prenda del ruso estereotípico. ¿Cómo se representa a un ruso en una serie/película gringa?, pronunciando la “R” muy marcada y con un ushanka en la cabeza, seguro.

Es probable que este gorro provenga de los sombreros que utilizaban las tribus mongolas que en el siglo XIII conquistaron la mayor parte de Asia, incluyendo la actual Rusia. Ya que el uso de gorros similares se pueden encontrar  también en China, Corea del Norte y Mongolia.

Los antecedentes del origen específico del gorro son bastante antiguos e imprecisos, pero se tiene conocimiento de un tipo de sombrero de piel usado durante muchos siglos en los actuales territorios rusos, pero con una forma mucho más sencilla y rústica. Es en el siglo XIX cuando se le añaden las características orejeras, que al parecer fueron influencia  de migraciones escandinavas. Las orejeras pueden ser atadas en la corona, cuando suben las temperaturas o bajo la barbillla, para proteger las orejas del frío más extremo. El nombre Ushanka deriva de ushi, que significa orejas, en ruso.

Originalmente eran fabricados en piel natural de castor, oveja, zorro o conejo, ya que por su pelaje denso conservaban mejor el calor. Aunque gracias a la globalización, manufactura económica e industrial del continente asiático y la explotación del Ushanka como símbolo turístico de la ex Unión Soviética, actualmente se puede encontrar en diversos colores y de distintos tipos de pieles artificiales.

El gorro se hizo conocido en occidente durante la II Guerra Mundial, cuando el Ushanka es introducido como indumentaria oficial de invierno para el ejército soviético, reemplazando al budenovka que era un tipo de gorro más ligero y poco adecuado para el frío extremo de aquellas latitudes.

La Unión Soviética, amada u odiada, tiene una atracción especial que sus rivales nunca alcanzaron, debe ser el misterio que encierra su casi impenetrable barrera lingüística, su remota y desconocida historia para occidente, y su clima inhumano. Lo cierto es que cada ciertos inviernos revive para occidente acompañada con su clásico gorro de piel. Ya sea en la colección de algún diseñador “inspirado” o por el estereotipo del cine hollywoodense.

A pesar de tener un uso bastante más extendido de lo que parece, en general siempre será conocido por “los de acá” como el “gorro ruso”. Usted dígalo bien: Ushanka.

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